Lo primero (lo más central y más tradicional) es escribir programas que los otros hackers opinen que son divertidos o útiles, y donar los fuentes del programa a la cultura hacker para que sean utilizados.
(Solíamos llamarlo free software pero esto confundía a demasiada gente, que no estaban seguros de qué se suponía que significaba free [en inglés, el término free es polisémico y puede significar "libre" o "gratis". En castellano no se da tal ambigüedad por lo que la expresión "software libre" resulta perfectamente adecuada — N. del T.]. La mayoría de nosotros, al menos un ratio 2:1 de acuerdo con los análisis del contenido de la web, ahora preferimos el término software "open source" [En castellano, sin embargo, se sigue usando habitualmente "software libre", aunque en esta versión hemos respetado, como es natural, el cambio en la terminología de Eric, que ha sustituido " free software" por open source en todos sus documentos, y lo hemos traducido por "código de fuente abierta" — N. del T.]).
Los más reverenciados semidioses del hackerismo son las personas que han escrito programas de gran magnitud, con grandes capacidades que satisfacen necesidades de largo alcance, y los donan, de tal manera que cualquiera pueda utilizarlos.